Dicen que padre puede ser cualquier persona, y estoy parcialmente de acuerdo con ese concepto. Voy a explicar por qué:
Biológicamente, cualquier hombre puede ayudar en la concepción de un bebé y llamarse padre; y, por esa relación sexual, que puede durar menos de 15 minutos (según los expertos, es de 7 a 13 minutos para que sea satisfactoria) y una falla de calculo en las cuentas, esa persona tiene una gran responsabilidad en sus hombros dentro de los próximos 9 meses.
Hasta ahora, esta fue la parte fácil de "hacer el bebé" y llamarse "Papá". Ahora, de aquí en adelante, las cosas se vuelven más difíciles, donde muchos fracasan y hasta abandonan la tarea que ellos mismos originaron.
Les contaré que yo fui padre muy joven, un chico inmaduro y calenturiento; una combinación muy peligrosa.
Solo tenía 23 años, estaba en la universidad, vivía con mis padres y tenía un trabajo donde ganaba un poco más del básico para mis gastos. Un día, mi novia y ahora madre de mi hija me dijo: "Hace más de una semana que no me baja". Luego de darme el escalofrío correspondiente y una prueba de embarazo barata en la farmacia (ya que no podía pagar un examen de sangre), me encontré ante la noticia paralizante de que iba a ser padre. Digo paralizante porque era un chico que a duras penas planificaba lo que iba a hacer el día siguiente. Ahora, debía programar en mi cabeza qué iba a hacer o cómo iba a cuidar a una bebé que venía camino.
Después de afrontar con todos los huevos la noticia de que iba a ser padre, me tocó hacer lo mismo con mis suegros, verlos a la cara y decirles que ese chico inmaduro iba a cuidar a su futura nieta y a su hija.
Créanme, todo lo que leyeron anteriormente seguia siendo la parte fácil. Porque desde el 17 de septiembre de 2003, fecha en la que me convertí en padre, y cargue por primera vez a mi hija en brazos, aprendí que ese título “Papá” era algo muy grande y debia buscar ser uno bueno, para no solo ser el individuo que aportaba con el espermatozoide. Mi pobre hija fue el proyecto más grande y desafiante que he tenido en esta vida. Con ella he tenido sentimientos tan profundos, sonreir con el corazon con cada triunfo, llorado de alegria por cada etapa alcanzada, de tristezampor cada decepción amorosa y así algunas otras emociones que no se lo siente por alguien más. Soy un padre orgulloso de mis hijos porque son buenos seres humanos y creo que es uno de los grandes triunfos que tengo hasta ahora. Nunca se deja de ser padre, y ahora lo entiendo. Ellos nos acompañaran o bueno nosotros los acompañaremos a ellos toda su vida y debemos prepararlos para todo e invertir en ellos todo lo que tenemos. No solo por los gastos económicos, que créanme son bastantes, más aún cuando intentamos darles a nuestros hijos lo que nuestros padres no nos dieron; sino también por la inversión de tiempo y no dejarnos ganar por un constante miedo a no hacerlo bien. Tendrás muchos momentos de dudas sobre tus decisiones, saber si ayudan o perjudican. Antes decidías por ti y si estaba mal, afrontabas tus errores.
Hasta ahora creo que vamos bien. Con errores y aciertos descubrí que PADRE no puede ser cualquier persona; el que fertiliza un óvulo y ayuda a concebir una vida sí puede ser cualquiera.
Es por eso que dedico este pequeño texto en su día a los Padres que se esfuerzan todos los días por hacerlo mejor, a ellos felicitaciones. Gracias por hacer un mundo bonito para sus hijos y ser el super héroe que sus hijos creen que son, y a los malos padres (que hay bastantes aunque los buenos somos mas) le digo sinceramente y desde el fondo de mi corazón: 🖕🏻
Feliz Día del Yo no se mejor preguntalé a tu Mami
(del Padre)
P.D.
Les dejo un video de como me sentí cada vez que cargue por primera vez a mis pequeños. Y gracias siempre por leer y compartir
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